Las digestiones pesadas afectan al 20-40% de la población general. También se conoce cómo dispepsia y más comúnmente, como indigestión.
Su origen habitualmente es multifactorial, la causa puede estar asociada a situaciones de pérdida del equilibrio de la microbiota y alteraciones del normal funcionamiento gastrointestinal. Puede estar alterada la actividad de los enzimas digestivos, de los ácidos biliares, un cambio en la acidez estomacal, etc. Una alimentación desordenada y la falta de ejercicio físico y el estrés, también son otros factores determinantes.
Como consecuencia de todo ello podemos notar que no hacemos bien la digestión, de alimentos concretos o a veces, de la comida en general.